UEG 2004

REQUISITOS DEL MÉDICO

ES MUY IMPORTANTE QUE EL CIRUJANO CUENTE CON LA CUALIFICACIÓN ADECUADA

El hecho de que una operación de cirugía estética no obedezca normalmente a cuestiones de salud no quiere decir que no se deban tomar todas las precauciones posibles ante las diversas eventualidades que, como en toda intervención quirúrgica, pueden surgir. Pero además, como en cualquier tipo de operación, es muy importante que la lleve a cabo el especialista adecuado. Consideraciones que, aunque parecen obvias, a veces se olvidan o se ignoran. Así pues, es fundamental ponerse en manos de un profesional cualificado, ya que esta rama de la medicina no está exenta de cierto intrusismo de personas que carecen de la cualificación necesaria. En nuestro país, la Cirugía Estética es uno de los campos de acción de la especialidad Cirugía Plástica, Reparadora y Estética. Para conseguir este título de especialista es necesario, tras licenciarse en Medicina y Cirugía, realizar unos estudios de postgrado a los que se accede a través de una oposición oficial denominada MIR (Médico Interno Residente). En el caso de la Cirugía Plástica se requieren cinco años de MIR en un hospital acreditado. Durante ese tiempo, el médico permanece un año en Cirugía General, otro en especialidades quirúrgicas afines y tres años específicos en Cirugía Plástica. Por tanto, sólo los doctores que acreditan estar en posesión del título de Especialista en Cirugía Plástica, Reparadora y Estética tienen la formación profesional que proporciona al paciente la calidad asistencial adecuada. Por otro lado, conviene también distinguir entre esta especialidad y la de médico estético, porque en ocasiones surgen conflictos de competencias. La raíz del problema, según el doctor José Sainz Arregui, presidente de la Sociedad Española de Cirugía Plástica y Reparadora, es que “el Ministerio de Sanidad no tiene bien delimitadas las competencias en este terreno” y en su opinión “los médicos estéticos no deberían realizar operaciones de cirugía estética, aunque de hecho algunos las hacen. Deberían limitarse a intervenciones menos agresivas como mesoterapia, algunos tipos de rellenos o intervenciones con láser”.

Teniendo en cuenta que entre un diez y un quince por ciento de las operaciones que realizan los cirujanos plásticos son arreglos de malas intervenciones de otros doctores, no está de más tomar todo tipo de precauciones. Por tanto, y como afirma el doctor Javier de Benito, “hay que desconfiar de aquéllos que prometen resultados maravillosos, que nunca hablan de los posibles riesgos, no responden claramente a todas las dudas del paciente, presionan para que se opere y que no puedan trabajar en hospitales acreditados”. Precisamente, el centro en el que tiene lugar la intervención, además de tener autorización para realizar este tipo de operaciones, debe disponer de los medios suficientes para proporcionar todo tipo de asistencia al paciente: quirófanos adecuados, unidades de despertar y una pequeña unidad de cuidados intensivos por si se presenta cualquier complicación. Además, siempre que se requiera anestesia general o sedación, debe estar presente un anestesista familiarizado con las técnicas de la cirugía plástica. Y, por supuesto, hay que ser precavido ante los centros en los que la primera entrevista la realiza un agente comercial en lugar de un médico, porque en ellos, la prioridad suele ser el negocio, no el paciente.

VOGUE Belleza. Requisitos del médico. Madrid, n. 8. ago. 2002. p. 14.

 

Acerca dos assuntos abordados pelo texto, é CORRETO afirmar que

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