UFRRJ 2001

LA NACION -Martes, 18/01/2000

 Cuando la amistad engendra productividad

            La OLA de reorganizaciones, despidos y traslados de sede en muchas empresas a nivel mundial ha tenido una consencuencia que con frecuencia se pasa por alto: la pérdida de valiosas amistades.

            Diana Freeland cuenta que el precio más alto que ha tenido que pagar por las reestructuraciones de las compañías donde ha trabajado en la última década ha sido la pérdida de 10 buenos amigos. Para ella, y muchos otros empleados, poder disfrutar de la compañía de sus amigos en el trabajo va de la mano con un mejor desempeño laboral. Por ende, cuando presenció la despedida, transferencia o partida a otra ciudad de un amigo tras otro, "todo mi sentido sobre lo que significaba estar en el trabajo cambió", relata Freenland, ex gerente de una importante empresa de energía que ahora dirige su propio negocio de asesoría en Houston, Texas.

            A medida que la pérdida de amistades crece, "uno pierde un sentido real de su lugar en la comunidad y el mundo", explica.

            La amistad en el trabajo es una importante aunque poco reconocida víctima de los cambios acelerados en el mercado laboral, y el costo podría ser mucho mayor de lo que las compañías se dan cuenta.

            Las investigaciones muestran que la capacidad de trabar amistades en el trabajo es un indicador importante de productividad. Pero la alta tasa de traslados de empleados y las reorganizaciones empresariales, junto con la rotación de empleados más alta en 20 años, dificulta mantener amistades en el trabajo durante mucho tiempo.

"EXISTE LA CREENCIA de que si todos mis empleados son grandes amigos, probablemente estén perdiendo el tiempo hablando en vez de trabajar", dice Larry Emond, vicepresidente de marketing de la compañía de sondeos y opinión pública Gallup Organization. Pero es probable que lo opuesto sea cierto.

            Un estudio de Gallup entre 400 compañías encontró que la capacidad de los empleados de formar mejores amigos en el trabajo es uno de los 12 indicadores más poderosos de un lugar de trabajo altamente productivo.

            Se descubrió que las compañías con baja rotación de empleados y alta productividad tendían a ser lugares donde los empleados decían tener un buen amigo. Algunos de los otros 11 buenos indicadores: un jefe que se preocupa por uno y la oportunidad de avanzar.

            Algunos clientes de Gallup se sorprendieron con este resultado. Pero es lógico si se toma en cuenta lo profundas que son algunas amistades en los centros de trabajo. Jane Baier y Sandy Heiler, por ejemplo, trabaron amistad mientras trabajaban en los laboratorios de GTE en Waltham, Massachusetts. Cuando a Baier le empezaron a fallar los riñones el año pasado y los esfuerzos por encontrar un donante en su familia fracasaron, Heiler le donó uno de los suyos.

 - Sue Shellenbarger

 

 "...Jane Baier y Sandy Heiler, trabaron amistad mientras trabajaban...". El adverbio indica que la amistad de los dos surgió:

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